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Agua potable pura y pérdida de peso

Agua potable pura y pérdida de peso

En los últimos tiempos ha crecido la popularidad de la opinión sobre las propiedades milagrosas del agua. En redes sociales y foros podemos encontrar mucha información sobre los consejos de nutricionistas e historias de los que tuvieron “suerte” y pudieron bajar de peso gracias al agua. En este artículo, nos dedicaremos a analizar estos fenómenos e intentaremos comprender si realmente el agua es el remedio tan deseado en la lucha contra el sobrepeso.

Las estadísticas dejan probado que el agua de verdad puede tener un efecto beneficioso e incluso ayudar a perder peso. Por lo menos la relación entre la pérdida de peso y la ingesta de líquidos está demostrada científicamente. Durante el estudio de Universidad de Stanford sobre el efecto del agua en el sobrepeso, los científicos han puesto de manifiesto la pérdida de peso en cada participante, cuyo consumo de agua antes de la prueba era de menos de 1 litro y que aumentaron su cantidad diaria hasta 2 litros, sin cambiar en absoluto su modo de vida. Cada mujer perdió cerca de 2 kilos.

En Alemania se manifestó un resultado similar: en 32 colegios fueron instaladas fuentes de agua potable y a tres mil estudiantes les explicaron lo útil que puede ser el agua. A finales del año escolar se dejó probado que beber agua de forma regular reduce el riesgo de sobrepeso en un 31%.

Una de las razones de este efecto es el aumento de consumo de calorías producido por el agua. Tras haber bebido dos vasos de agua, aproximadamente 500 ml, en unos diez minutos la tasa metabólica sufre un aumento del 30%. Este efecto durará al menos una hora. Beber 2 litros de agua al día será suficiente para perder cerca de 100 kilocalorías diarias. Es equivalente a una caminata de 40 minutos o a la limpieza del suelo durante media hora. Además, si el agua que bebe está fría, el cuerpo gastará aún más energía para calentarla hasta la temperatura corporal.

También es muy importante controlar el consumo de líquidos. Saciando la sed solo con agua se ayuda no solo a aumentar el consumo de calorías, sino también a reducir la ingesta de éstas. Los zumos, tés, jugos, bebidas de fruta, leche, etc. pueden contener más calorías que el agua. Muchas investigaciones demuestran que los amantes del agua consumen un promedio de 200 kilocalorías menos que la gente que no controla lo que bebe.

Durante otro estudio, los investigadores seleccionaron 50 mujeres con sobrepeso y les ofrecieron a beber 2 vasos de agua tres veces al día: media hora antes de desayunar, comer y cenar. Pasadas ocho semanas resultó que el apetito de las mujeres disminuyó. Al reducir su dieta comenzaron a ingerir menos calorías y en ocho semanas cada una perdió cerca de un kilo y medio.

No cabe duda que es muy importante en cualquier asunto buscar cierto punto medio. Nos gustaría que los lectores presten atención a la importancia de cumplimiento de las normas de consumo de agua: se trata de 3,7 litros por día para un hombre y 2,7 litros para una mujer, teniendo en cuenta los líquidos que obtiene el cuerpo de sopas, frutas, etc.

No se recomienda sobrepasar estas normas para evitar un fenómeno tan peligroso como la intoxicación con agua.

Los líquidos hay que tomárselos como un medicamento: en pequeña dosis es casi inútil y en gran cantidad se convierte en un veneno. Así que mantengan este punto medio y perderán peso.